Francia y el Valle de Loira: entre el lujo y la Historia Mundial I
En muchas ocasiones, los destinos turísticos propuestos son promocionados desde el placer de las bellezas naturales; sin embargo, es posible conjugar placer, belleza e Historia. Ese es el caso de la propuesta aquí presente. Entusiasma con sólo pensarlo: transitar por pasajes soñados e inmortalizados por la Historia, además de la belleza arquitectónica y artística que manifiestan en sus instalaciones. Poblado de impresionantes castillos construidos durante el siglo X y el XVIII (los más opulentos datan del siglo XV en adelante), el Valle de Loira (Vallée de la Loira, en su idioma original), fue proclamado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco durante el año 2000, convirtiéndolo en lo que denominamos “paisaje cultural”.
Lo más interesante de este paseo es que las obras arquitectónicas no datan del mismo período, con lo cual asistimos a un sinfín de manifestaciones artísticas y emblemas históricos. Las últimas construcciones pertenecen al Siglo de las Luces. Este sitio era el elegido por los monarcas y nobles ya que se ubica a expensas del río. Sin embargo, aquellos afortunados y deseosos de habitar cerca del poder construyeron sus palacios en los alrededores . Numerosas personalidades del ambiente político y artístico solían vivir allí. Con el transcurrir del siglo XVI, París comienza a cobrar importancia en lo que a poder político se refiere y este Valle ha quedado relegado al tiempo de distracción, vacaciones de verano y descanso.
El lujo y los placeres como estilo de vida fueron impulsados bajo el gobierno de Luis XIV y continuados hasta el reinado de Luis XVI. Con el advenimiento de la Revolución Francesa (1789), muchas construcciones se han perdido a causa de derrumbes y destrucciones propias del ataque hacia el poder dirigente. A pesar de ellos, numerosos palacios y castillos quedan en pie y son visitados asiduamente.
La importancia histórica de dichos edificios llega incluso hasta el siglo XX, ya que durante tanto la Primera Guerra Mundial, como la Segunda, supieron funcionar como albergue para contingentes militares de alto rango. Sobre el final de este siglo, los castillos fueron convirtiéndose paulatinamente en centros turísticos. Hoy en día muchos de ellos se transformaron en hoteles de lujo extremo y algunos otros en costosísimos restaurantes de manjares.
Aquellos que se mantienen dentro de la propiedad privada, teniendo en cuenta el público turista, ofrecen visitas guiadas para los grupos que acuden deseosos de historia y belleza edilicia. Absolutamente todos dan cuenta del florecimiento histórico, arquitectónico y artístico que conquistó Francia en todos sus períodos y estilos.
2 comentarios:
me gusta el nuevo rumbo de tu blog, diseño y fotos lo hacen más atractivo, color ¡¡¡COLOR!!! que way.
Saludos.
Gracias. Tomo nota como diria Juncal
Me bajo a la junta de distrito a dar un poco de caña A ver si viens algundia
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